miércoles, 8 de diciembre de 2010

Descubre tu Elemento


¿Te gusta tu trabajo? ¿Disfrutas de una actividad donde sientes que tu creatividad fluye? ¿Te levantas cada día deseando empezar una nueva jornada laboral? Si tu respuesta es NO, todavía no has encontrado tu "ELEMENTO".


"Cuando nos apasiona lo que hacemos y además tenemos la preparación adecuada para hacerlo bien, estamos en nuestro "Elemento", un estado maravilloso en el que trabajamos sin cansancio y con gran creatividad"
Ken Robinson


Acabo de leer el libro de Ken Robinson sobre "El Elemento" que el define como "la zona" donde confluyen tus pasiones (aquello que disfrutas haciendo) y tus talentos (aquello que es natural en ti y que haces bien). Es un libro tremendamente inspirador, al igual que escuchar a su autor, y que te recomiendo si sientes que tiene que haber algo más que lo que estás haciendo y quieres descubrirlo para como diría Wayne Dyer, "no morir con tu música dentro".

Si te encuentras en el grupo de los que todavía no lo han encontrado, no eres el único. Como dice Ken Robinson:

" Irónicamente, la educación es una de las principales razones por las que esto ocurre. El resultado es que hay demasiada gente que nunca conecta con sus verdaderos talentos naturales y, por tanto, no es consciente de lo que en realidad es capaz de hacer.

En este sentido, no saben quienes son en el fondo."
A través del ejemplo de numerosas personas, llegamos a lo que Robinson define como el Elemento: "allí donde confluyen las cosas que te encanta hacer y las que se te dan bien." Así que el primer paso para descubrir nuestro propio Elemento pasa por identificar cuáles son nuestras habilidades y pasiones personales.

¿Qué nos ha impedido conocerlas hasta ahora?

Robinson habla de 3 limitaciones sobre las que hemos edificado nuestra vida.

- la primera limitación está en la comprensión del alcance de nuestras posibilidades. Dice: "todos nacemos con una capacidad extraordinaria para la imaginación, la inteligencia, las emociones, la intuición, la espiritualidad y con conciencia física y sensorial. En la mayoría de los casos sólo utilizamos una mínima parte de estas facultades, y algunas personas no las aprovechan en absoluto."

- la segunda limitación está en nuestra comprensión de cómo todas estas capacidades se relacionan entre si de forma integral. Es decir, nuestra mente, nuestro cuerpo y nuestras emociones no son compartimentos estancos. La educación está basada en el cuello para arriba, somos como dice una cabeza desconectada de nuestro cuerpo y nuestras emociones.

- la tercera limitación está en nuestra escasa comprensión del potencial que tenemos para crecer y cambiar. No es cierto que la vida sea un proceso lineal y que a medida que crecemos vamos perdiendo nuestras capacidades y oportunidades. Todos podemos reinventarnos en cualquier momento.

Te dejo con algunas partes del libro:

Pensar de forma diferente

"Uno de los principios clave del Elemento es que tenemos que cuestionar aquello que damos por sentado acerca de nuestras habilidades y de las habilidades de otra gente." "Uno de los enemigos de la creatividad y la innovación, en particular en relación con nuestro propio crecimiento, es el sentido común."

Existen tantos tipos de inteligencia como personas. No tiene sentido que limitemos a las personas según test de inteligencia que sólo miden parte de nuestras capacidades y se olvidan de otras tan o más importantes.

Más allá de la imaginación

"Inteligencia y creatividad van de la mano. Estoy convencido de que no se puede ser creativo y no actuar inteligentemente. Del mismo modo, la forma más elevada de inteligencia consiste en pensar de manera creativa" "La creatividad es el proceso de tener ideas originales que tengan valor" "Normalmente las personas que utilizan la creatividad en el trabajo tienen algo en común: aman el medio en el que trabajan" "Las personas que fundamentalmente aman lo que hacen no piensan en ello como si fuera un trabajo en el sentido habitual de la palabra. Lo hacen porque quieren y porque al hacerlo están en su Elemento" "Una de las razones principales por las que tantas personas creen que no son creativas es porque no han encontrado su medio" "Ser creativo es hacer nuevas conexiones, de forma que podamos ver las cosas desde nuevos puntos de vista y desde diferentes perspectivas"

En la zona

"Hacer lo que amamos puede implicar todo tipo de actividades imprescindibles para el Elemento pero que no son su esencia: cosas como estudiar, organizar, planificar, entrenar, etc. E incluso cuando estamos haciendo aquello que amamos, pueden darse frustraciones, decepciones y momentos en los que sencillamente no funciona o no cuaja" "Hacer aquello que amamos no garantiza estar en la zona todo el tiempo. Algunas personas desarrollan rituales personales para alcanzar la zona" "Una de las señales más significativas de que estamos en la zona es la sensación de libertad y autenticidad" "Cuando estamos en nuestro Elemento, sentimos que estamos haciendo lo que se supone que tenemos que estar haciendo y siendo lo que se supone que tenemos que ser" "El tiempo tiende a pasar más rápido, con mayor fluidez" "Otra característica es el desplazamiento hacia cierto tipo de "metaestado" donde las ideas aparecen más rápidamente, como si estuvieses conectado a una fuente que hace que sea significativamente más fácil lograr tu cometido" "Estar en el Elemento y, en especial en la zona, no quita energía: la da" "Estar en la zona te conecta con tu Yo más natural"

Encontrar tu tribu

"Hallar la tribu correcta puede ser imprescindible para encontrar nuestro Elemento. Por otra parte, sentir en lo más profundo del alma que uno está con la tribu equivocada es probablemente un buen signo de que hay que buscar en alguna otra parte" "Conectar con personas que comparten las mismas pasiones que tú te demuestra que no estás sólo, que hay otros como tú y que, aunque tal vez haya muchos que no entiendan tu pasión, hay otros que si"

¿Qué pensarán los demás?

"Encontrar tu elemento puede ser un desafío en muchos planos. A veces el desafío está en el interior de uno mismo, en la falta de confianza o el miedo al fracaso. A veces la verdadera barrera la forman las personas cercanas a ti y la imagen y las expectativas que tienen de ti. Otras veces los obstáculos no son las personas que conoces sino la cultura general que te rodea" "Es probable que te encuentres envuelto en una red de obligaciones sociales y expectativas que, de forma tácita, pongan límites a tus ambiciones. Muchas personas no encuentran en Elemento porque no tienen la confianza o el estímulo necesarios para salir fuera de su círculo de relaciones"

¿Te sientes afortunado?

"Ser bueno en algo y que te apasione es imprescindible para encontrar el Elemento. Pero no es suficiente. Llegar hasta allí depende fundamentalmente de la opinión que tengamos de nosotros mismos y de nuestra vida. El Elemento también es una cuestión de actitud" "La gente afortunada provoca su suerte con su actitud" "Wiseman ha identificado cuatro principios que caracterizan a las personas afortunadas. Estas tienden a maximizar las oportunidades. Segundo, suelen ser muy efectivas a la hora de prestar atención a su intuición y de realizar trabajos concebidos para estimular sus habilidades intuitivas (como la meditación). El tercer principio es que las personas con suerte esperan serlo, crean una serie de profecías de autorrealización porque se internan en el mundo previendo un resultado positivo. Por último, la actitud de las personas afortunadas les permite convertir la mala suerte en buena. No consienten que la mala suerte las doblegue, y se mueven con rapidez para tomar el control de la situación cuando la cosa no les va bien" "Quizás la actitud más importante para sembrar la buena suerte es tener un fuerte sentido de perseverancia"

Que alguien me ayude

"A menudo, encontrar nuestro Elemento requiere de la ayuda y orientación de otras personas. A veces esta viene de alguien que ve algo en nosotros que nosotros no vemos" "A veces procede de una persona que hace salir lo mejor de nosotros" "Los mentores y coaches suelen desempeñar alguno de los cuatro papeles siguientes, si no todos. El primero es el reconocimiento. Los mentores reconocen la chispa de interés o la fascinación, y pueden ayudar a un individuo a ejercitar los componentes específicos de la disciplina que concuerde con la capacidad y la pasión de esa persona. El segundo papel de un mentor es estimular. Los mentores nos llevan a creer que podemos conseguir algo que, antes de conocerlos, a nosotros nos parecía improbable o imposible. No nos permiten sucumbir a la falta de confianza en nosotros mismos durante demasiado tiempo, ni a la idea de que nuestros sueños son inalcanzable. Están cerca para recordarnos las habilidades que poseemos y lo que podemos llegar a conseguir si continuamos trabajando duro. El tercer papel es el de facilitar. Nos aportan consejos y técnicas que nos allanan el camino. El cuarto papel es el de exigir. Los mentores eficaces nos empujan más allá de lo que nosotros consideramos que son nuestros límites"

¿Demasiado tarde?

"Existen muchísimas pruebas de que las oportunidades de descubrir nuestro Elemento se dan con mucha más frecuencia en nuestra vida de lo que creemos" "Pueden pasar cosas extraordinarias que mejoren nuestra vida cuando dedicamos tiempo a salir de nuestra rutina, a reconsiderar nuestra trayectoria y a recuperar las pasiones que dejamos atrás ( o que nunca llegamos a perseguir) por una cosa o por otra. En cualquier período de nuestra vida podemos tomar nuevas direcciones. Tenemos la capacidad de descubrir nuestro Elemento practicamente a cualquier edad "

"Existe la fuente de la juventud: se trata de tu mente, de tus talentos, de la creatividad que lleves a tu vida y a las de aquellos a los que amas. Cuando aprendas a conectar con esa fuente, habrás vencido realmente a la edad" Sophia Loren

A cualquier precio

"Muchas personas actúan a nivel profesional en los campos de especialización que aman pero escogen no ganarse la vida de esa manera" "Estar en tu Elemento no quiere decir necesariamente dejar lo demás y dedicarte a ello a tiempo completo todos los días. Para algunas personas, en ciertas etapas de su vida, simplemente no es práctico dejar su trabajo o sus obligaciones para ir en pos de lo que les apasiona. Otras personas escogen no hacerlo por un montón de razones. Mucha gente se gana la vida haciendo una cosa, y luego saca tiempo y espacio para hacer lo que de verdad les gusta" "Hacer lo que te encanta y que se te da bien aunque sea durante un par de horas a la semana puede ayudarte a que todo lo demás sea más llevadero"

Te dejo con una conferencia de este autor sobre cómo las escuelas matan la creatividad. Espero que lo disfrutes:


martes, 7 de diciembre de 2010

Entrevista Ken Robinson



"La creatividad se aprende igual que se aprende a leer"

Entrevista a Ken Robinson en LA CONTRA del periódico La Vanguardia, 03/11/2010

Un día visitando un cole vi a una niña de seis años concentradísima dibujando. Le pregunté: "¿Qué dibujas?". Y me contestó: "La cara de Dios".

¡. ..!

"Nadie sabe cómo es", observé. "Mejor - dijo ella sin dejar de dibujar-,ahora lo sabrán".

Todo niño es un artista.

Porque todo niño cree ciegamente en su propio talento. La razón es que no tienen ningún miedo a equivocarse... Hasta que el sistema les va enseñando poco a poco que el error existe y que deben avergonzarse de él.

Los niños también se equivocan.

Si compara el dibujo de esa niña con la Capilla Sixtina, desde luego que sí, pero si la deja dibujar a Dios a su manera, esa niña seguirá intentándolo. El único error en un colegio es penalizar el riesgo creativo.

Los exámenes hacen exactamente eso.

No estoy en contra de los exámenes, pero sí de convertirlos en el centro del sistema educativo y a las notas en su única finalidad. La niña que dibujaba nos dio una lección: si no estás preparado para equivocarte, nunca acertarás, sólo copiarás. No serás original.

¿Se puede medir la inteligencia?

La pregunta no es cuánta inteligencia, sino qué clase de inteligencia tienes. La educación debería ayudarnos a todos a encontrar la nuestra y no limitarse a encauzarnos hacia el mismo tipo de talento.

¿Cuál es ese tipo de talento?

Nuestro sistema educativo fue concebido para satisfacer las necesidades de la industrialización: talento sólo para ser mano de obra disciplinada con preparación técnica jerarquizada en distintos grados y funcionarios para servir al Estado moderno.

La mano de obra aún es necesaria.

¡Pero la industrialización ya no existe! Estamos en otro modo de producción con otros requerimientos, otras jerarquías. Ya no necesitamos millones de obreros y técnicos con idénticas aptitudes, pero nuestro sistema los sigue formando. Así aumenta el paro.

Pero se nos repite: ¡innovación!

La piden los mismos que la penalizan en sus organizaciones, universidades y colegios. Hemos estigmatizado el riesgo y el error y, en cambio, incentivamos la pasividad, el conformismo y la repetición

No hay nada más pasivo que una clase.

¿Es usted profesor, verdad? Las clases son pasivas porque los incentivos para estar calladito y tomar apuntes que repetirá son mayores que los de arriesgarse a participar y tal vez meter la pata. Así que, tras 20 años de educación en cinco niveles que consisten en formarnos para unas fábricas y oficinas que ya no existen, nadie es innovador.

¿Cuáles son las consecuencias?

Que la mayoría de los ciudadanos malgastan su vida haciendo cosas que no les interesan realmente, pero que creen que deben hacer para ser productivos y aceptados. Sólo una pequeña minoría es feliz con su trabajo, y suelen ser quienes desafiaron la imposición de mediocridad del sistema.

Tipos con suerte...

Son quienes se negaron a asumir el gran error anticreativo: creer que sólo unos pocos superdotados tienen talento.

"Sé humilde: acepta que no te tocó".

¡Falso! ¡Todos somos superdotados en algo! Se trata de descubrir en qué. Esa debería ser la principal función de la educación. Hoy, en cambio, está enfocada a clonar estudiantes. Y debería hacer lo contrario: descubrir qué es único en cada uno de ellos.

¿La creatividad no viene en los genes?

Es puro método. Se aprende a ser creativo como se aprende a leer. Se puede aprender creatividad incluso después de que el sistema nos la haya hecho desaprender.

Por ejemplo...

Soy de Liverpool y conozco el instituto donde recibieron clases de música mi amigo sir Paul McCartney y George Harrison... ¡Dios mío! ¡Ese profesor de música tenía en su clase al 50 por ciento de los Beatles!

Y...

Nada. Absolutamente nada. McCartney me ha explicado que el tipo les ponía un disco de música clásica y se iba a fumar al pasillo.

A pesar del colegio, fueron genios.

A Elvis Presley no lo admitieron en el club de canto de su cole porque "desafinaba". A mí, en cambio, un poliomielítico, me admitieron en el consejo del Royal Ballet...

Ahí, sir, acertaron de pleno.

Allí conocí a alguien que había sido un fracaso escolar de ocho años. Incapaz de estar sentada oyendo una explicación.

¿Una niña hiperactiva?

Aún no se había inventado eso, pero ya se habían inventado los psicólogos, así que la llevaron a uno. Y era bueno: habló con ella a solas cinco minutos; le dejó la radio puesta y fue a buscar a la madre a la sala de espera; juntos espiaron lo que hacía la niña sola en el despacho y... ¡estaba bailando!

Pensando con los pies.

Es lo que le dijo el psicólogo a la madre y así empezó una carrera que llevó a esa niña, Gillian Lynne, al Royal Ballet; a fundar su compañía y a crear la coreografía de Cats o El fantasma de la ópera con Lloyd Webber.

Si hubiera hecho caso a sus notas, hoy sería una frustrada.

Sería cualquier cosa, pero mediocre. La educación debe enfocarse a que encontremos nuestro elemento: la zona donde convergen nuestras capacidades y deseos con la realidad. Cuando la alcanzas, la música del universo resuena en ti, una sensación a la que todos estamos llamados.

Buscando la 'zona'

Salgo tan inspirado de la entrevista a Ken Robinson que no me resigno a reducirla a esta Contra. Así que, si ustedes me lo piden, explicaremos de su mano en breve cómo encontrar nuestro elemento creativo. Porque a ser innovador se aprende igual que a sumar: a cualquier edad y en cualquier circunstancia, con la única condición de tener ganas. Robinson precisa cómo lograrlo en el informe que está transformando la educación británica. Y me anima a desaprender lo mal aprendido en el cole y a arriesgarme con ustedes a renovarnos hasta encontrar nuestra propia zona,nuestro mentor y tribu creativa, para alcanzar la misma e intensa conexión con la vida que gozaron Einstein o Mozart.


lunes, 6 de diciembre de 2010

Nuestro miedo más grande

Hay secuencias que pueden inspirarte en sólo 2 minutos. Esto es lo que pasa con esta escena de la película Coach Carter que te recomiendo. El texto está basado en unas palabras de Marianne Williamson de su libro "Volver al amor". Hace años compartí el texto en este mismo blog.

De vez en cuando es bueno recordar que esa FUERZA está dentro de cada uno de nosotros.



sábado, 27 de noviembre de 2010

El calendario de Adviento


He llegado por fin a lo que quería ser de mayor: un niño. Joseph Heller
Una de las tradiciones que más disfrutaba cuando era pequeña y se acercaban estas fiestas Navideñas era el "calendario de adviento". Para aquellos que no lo conozcan se trata de una tradición muy conocida en Estados Unidos y en los países del norte de Europa, y que mi padre "importaba" de sus viajes. Consiste en un mural, normalmente de cartón, que muestra algún motivo navideño: un árbol, una casa o una escena de navidad, con 25 ventanitas o puertas que representan los días anteriores a la Navidad. Cada día, empezando el 1 de diciembre, hay que abrir el recuadro correspondiente a ese día y descubrir de esta forma el "regalo" en forma de dibujo, cita, algo que hacer o en los más actuales chuches y chocolatinas, y esperar al día siguiente para poder abrir el siguiente.

A pesar de que nuestra impaciencia en ocasiones nos impulsaba a querer abrir todas de golpe, teníamos que armarnos de paciencia y abrir sólo la correspondiente a ese día. Así que cuando nos levantábamos lo primero que hacíamos era ir al calendario y descubrir que sorpresa nos había tocado.

A pesar del tiempo que ha pasado todavía recuerdo la ilusión que sentíamos al despertar e ir raudos a descubrir nuestro regalo con la convicción de que al día siguiente tendríamos otro esperando por nosotros.

Esta semana pensando en esta anécdota tuve una idea. ¿Por qué cuando crecemos tenemos que perder esa capacidad de ilusionarnos y dejarnos sorprender por los "regalos" que la vida nos depara? Yo me niego a perder esa mirada infantil que algunas personas califican de manera "despectiva" como algo poco serio, pero que yo considero todo un "halago".

Así que he ideado el siguiente juego que quiero compartir con vosotros: CREAR NUESTRO PROPIO CALENDARIO DE ADVIENTO. Para ello sólo vamos a necesitar una cartulina del color que te guste o un folio que dividiremos en 25 recuadros, cada uno correspondiente a un día, del 1 al 25 de diciembre.

El objetivo es que empezando el próximo miércoles y durante los próximos 25 días vamos a levantarnos con la "clara intención" de estar abiertos a recibir un regalo. Y en cuanto lo descubramos, lo apuntamos en la casilla correspondiente. Un regalo mínimo por día. Puede ser cualquier cosa que os despierte una sonrisa: una llamada de alguien querido, que os inviten a un café, una sonrisa anónima, lo que sea. Sólo hay tres requisitos: mantener la intención al levantarnos, estar con las "antenas" bien enfocadas para captarlo y dar las gracias por cada uno de los que recibamos.

Al final del día tiene que haber algo escrito en la casilla correspondiente. Y si no has encontrado nada, puede ser una de dos. O bien no has estado lo suficientemente atento, en cuyo caso puedes preguntarte: Si hoy hubiese recibido un regalo que me haya pasado desapercibido, ¿cual sería? O bien puede ser que estés intentando "controlar" los regalos (por ejemplo que alguien haga algo que esperas) ó que tus expectativas sean tan elevadas que existan más probabilidades de que no se cumplan que de que lo hagan.

Y aunque lo ideal es que el regalo sea "sorpresa", también vamos a tener 5 comodines "por que yo lo valgo" que podemos canjear por algo que nos apetezca y nos regalemos a nosotros mismos durante ese día (una hora sin niños, un partido con los amigos, un masaje, algo que deseemos hacer simplemente por nosotros).

¿Está claro? ¡Pues manos a la obra!
¡Yo ya estoy deseando que llegue el miércoles para recibir mi primer regalo!

© Iciar Piera Iglesias

PD: Si estás pensando en hacer uno para tu hijo, en este blog hay unas ideas muy bonitas que podrás hacer tú mismo y que le encantarán.

PD2: El dibujo de esta entrada es el calendario que ha hecho una lectora del blog (gracias Tamara) y que muy amablemente me ha enviado. ¡Es precioso! Ha sido mi "regalo" del día 2.




miércoles, 17 de noviembre de 2010

El coach de Enrico Caruso



Cuentan que en cierta ocasión el gran tenor Enrico Caruso sufrió un ataque de miedo escénico. Los espasmos causados por el miedo intenso le provocaron una contractura en los músculos de la garganta. Sentía sus cuerda vocales paralizadas, inútiles. Se quedó entre bambalinas, ya vestido para actuar, con el rostro empapado en sudor. Se suponía que iba a salir a cantar al escenario en tan sólo unos momentos ante una multitudinaria y expectante audiencia.

Tembloroso dijo: "No puedo cantar. Se van a
reír de mí. Mi carrera está acabada".

Se
dio la vuelta para regresar a su camerino, pero de repente se paró y gritó: "Mi Pequeño Yo está intentando matar a mi Gran Yo".

Se giró hacia el escenario otra vez y se
irguió más alto. "Sal de aquí", ordenó, dirigiéndose a su Pequeño Yo. "EL YO GRANDE QUIERE CANTAR A TRAVÉS MIO".

Empezó a gritar: "¡Fuera, fuera, el Yo Grande va a cantar!". Cuando sonó la llamada, salió al escenario y cantó de forma
majestuosa y gloriosa. Cautivó a la audiencia.

¿Te suena? Todos en algún momento de nuestra vida hemos sufrido una situación parecida. Nos disponemos a hacer algo nuevo, o damos un paso hacia lo que nuestro corazón desea y entonces nos quedamos paralizados. Hay una vocecita saboteadora que empieza a recordarnos lo inútil de nuestra acción, las veces que lo hemos intentado ya y hemos fallado, que no tenemos dinero, no somos capaces, puedes hacerlo mejor. Puedes poner aquí tu propia historia que es lo que esa voz te cuenta para disuadirte de SER GRANDE y mantenerte dentro de tu "zona de confort".

Mis clientes de coaching la conocen muy bien y en el coaching Co-Activo la llamamos los Gremlins.

Cuando el Gremlin aparece como en el caso de Caruso, con su diálogo interno, nos paralizamos y dejamos que nuestro Yo Pequeño mate a nuestro Yo Grande. Le escuchamos, seguimos su consejo y nos paramos o damos marcha atrás cuando nos había costado tanto darnos ese empujón.

Durante mucho tiempo no escribía mucho en este blog porque mi "Señorita Sádica" que es mi Gremlin perfeccionista siempre me decía que no sabía escribir, que no era original, que podía hacerlo mejor, bla, bla, bla. Mi "Señorita Sádica" es una mujer joven y guapa vestida de cuero negro al estilo de cat woman con un látigo que mueve con una gran destreza. Cuando está presente mi creatividad y mi libertad de expresarme se paralizan ya que nunca podré llegar a su nivel de exigencia. Cuando esa energía está presente, me pongo tensa e incluso me empieza a doler la cabeza. Me recrimino, y suelo abandonar. Enfadado

Pero me encanta escribir y me encanta compartir con la gente lo que considero que puede ayudarles a crecer. Me encanta aprender y no hay más forma de aprender que equivocándose, algo que por supuesto mi "Gremlin" no permite: "Antes muerta, que equivocarse".

Siguiendo el ejemplo de Caruso, mi Yo Grande quiere escribir y compartir y hacerlo cada vez mejor pero para eso necesito ¡HACERLO!

Así que al igual que he hecho yo y muchos de mis clientes, cuando aparezca esa vocecita o vozarrón que pretende disuadirte de hacer lo que tu corazón anhela, ponte de pie (ya sabes que la mente sigue al cuerpo) y en voz alta grita: "Cállate, Mi Yo Grande quiere escribir, o cantar, o ser feliz, o diseñar, estudiar, puedes añadir lo que realmente quieras. ¡Fuera, fuera, mi Yo Grande va a expresarse!".

Tu Yo Grande quiere que BRILLES, DESTAQUES y SEAS LO MÁS FELIZ POSIBLE. Ese es el verdadero sentido de nuestra existencia, cada día dejar salir un poquito más de ese Yo Grande. Escucharle y expresarle, e ir elevando el volumen de esa voz. Sólo eso conseguirá que cuando el Yo Pequeño aparezca con su historia, el volumen de tu Yo Grande sea tan elevado que casi no le escuches.

¡Mi Yo Grande quiere compartir a través de la escritura y hoy está feliz!

¿Quien dirige tu vida, tu Yo Grande o tu Yo Pequeño?

Por cierto, ¿quién sería el coach de Enrico Caruso? Guiño

© Iciar Piera Iglesias




jueves, 11 de noviembre de 2010

Los diez secretos de la Abundancia



Este fin de semana aprovechando el puente de la Almudena me dediqué a hacer limpieza de correos de las diferentes cuentas que mantengo. Una actividad que os recomiendo ya que como dice el Feng Shui, el orden externo lleva al orden interno.

Haciendo esa limpieza he recuperado este mail que me envió una clienta (gracias Brígida) que quiero compartir con vosotros. Se trata de un resumen del libro "Los diez secretos de la Abundancia" de Adam J. Jackson.


01.- EL PODER DE LAS CREENCIAS
La gente no logra lo que es capaz de hacer, sino lo que se cree capaz de hacer.Todas las circunstancias de nuestra vida son un reflejo de nuestras creencias.

02.- EL PODER DE UN DESEO ARDIENTE
No puedes obtener nada que merezca que merezca la pena en esta vida a no ser que tengas un deseo ardiente de ello. Tienes un deseo ardiente cuando estas dispuesto a hacer todo lo que sea preciso para lograrlo (excepto tu salud, relaciones y el respeto por ti mismo).

03.- EL PODER DE LA SOLIDEZ DE PROPÓSITO
Puedes lograr cualquier cosa que desees en la vida siempre y cuando sepas exactamente lo que quieres y por qué lo quieres. Debes ser específico a la hora de marcarte metas, saber las razones que descansan tras ellas y cuando deseas lograrlas, por ejemplo, no es suficiente decir que quieres ser rico. Sino lo que vas a hacer para conseguirlo.

04.- EL PODER DE UN PLAN DE ACCIÓN ORGANIZADO
Cuando elaboramos un plan de acción estamos diseñando la vida que deseamos llevar. Si quieres asegurarte el éxito de tus metas debes desarrollar una estrategia, un plan de acción organizado. Si quieres triunfar en algo debes hacer tres cosas: organízate…, organízate y ¡organízate! Antes de aceptar un trabajo o abrir una empresa, hazte las siguientes preguntas: ¿Disfrutaré con este tipo de trabajo?, ¿Está el trabajo en consonancia con mis talentos y capacidades?, ¿Me acercará a mis metas profesionales y económicas?

05.- EL PODER DEL CONOCIMIENTO ESPECIALIZADO
El área más importante de conocimiento especializado: conocer las necesidades de tus clientes potenciales. Si sabes lo que la gente quiere y necesita, puedes triunfar en cualquier negocio.

06.- EL PODER DE LA PERSEVERANCIA
Nada en el mundo puede sustituir a la PERSEVERANCIA. El talento no lo hará; nada es más común que un hombre de talento sin éxito. El genio tampoco; el genio no premiado es casi un axioma. La educación por si sola tampoco; el mundo esta lleno de cultos sin gloria. Solo la perseverancia y la firmeza son omnipresentes.

07.- EL PODER DE LA REGULACIÓN DE GASTOS
La única forma de crear una fuente regular de ingresos es, o bien ganas más de lo que gastas o que el dinero que ganas trabaje por ti. Si ahorras de forma regular y lo inviertes sabiamente el dinero te producirá interés y crecerá. La riqueza no viene determinada por el dinero que ganas, sino por la calidad de vida resultante. La regulación de gastos te ayudará a vivir a gusto dentro de tus posibilidades y a crear unos ingresos.

08.- EL PODER DE LA INTEGRIDAD
¿De qué se beneficia un hombre que gana el mundo pero pierde el mundo? Nuestras acciones, palabras, e incluso pensamientos, son como bumeranes: siempre vuelven a nosotros.
Intentas crear riqueza mediante el engaño y el fraude es como intentar construir una casa sobre arena: no tardará en derrumbarse.

Cuando consideres un curso de acción en tu vida personal o en una empresa, formula las siguientes preguntas: ¿Es legal? ¿Es moralmente correcto? ¿Me hará sentirme orgulloso de si mismo? ¿Me gustaría que mi familia se enterase? ¿Me seguiré respetando a mi mismo después de haberlo hecho?

09.- EL PODER DE LA FE
Cuando reflexiones sobre un proyecto en el que crees, después de elaborar un plan de acción organizado para asegurarte de su viabilidad, pregúntate: “¿Lo haría si supiera que no puede fallar?” Haz lo que harías si supieras que no puedes fallar.

10.- EL PODER DE LA CARIDAD
Muy raras veces se logra abundancia de algo sin la ayuda de los demás o sin ayudar a otros. Al ayudar a otros nos ayudamos a nosotros mismos. Siempre que das algo se te devuelve con creces.

¿Cual de estos diez secretos es el que está más presente en tu vida? ¿A cual necesitas prestarle más atención? ¿Qué vas a hacer para prestarle más atención durante esta semana?






miércoles, 3 de noviembre de 2010

No sin mi blackberry


Me confieso Padre, he pecado...

Imagínate la siguiente escena: Quedas con un amigo para cenar. Hace tiempo que no sabes nada de él y te apetece verlo. Después de los besos de bienvenida y las preguntas de cortesía, te das cuenta de que lo que pensabas que iba a ser una cena para dos se convierte en una cena para tres. Hay un invitado más que desde el primer momento hace acto de presencia y reclama su atención. Al principio a través de una música sugerente frente a la que tu amigo no es capaz de resistirse y se lanza con un disculpa en los labios. No pasa nada, quizás sea algo urgente. Pero no, aunque eso no parece afectarle inmerso en la conversación. Tu mientras tanto miras alrededor y te encuentras con otras miradas que se encuentran en la misma situación: Están esperando la vez. Aburrido Cuelga y seguís con la conversación (¡por fin tengo suerte!) pero observas que ese objeto última generación, que indudablemente tiene un diseño mucho más actual y sensual que el tuyo, sigue emitiendo ruiditos (mensaje) ó lucecitas (mensajes de texto) cual novia celosa. Y ante los que su "amo" (yo más bien diría esclavo) reacciona con rapidez contestando o mirándolo de reojo.

Esta situación se ha convertido en más habitual de lo que me gustaría. Hoy en día es fácil ver a parejas que cenan juntas mientras cada uno habla por su móvil o contesta a uno de los múltiples mensajes que aparecen a intervalos de segundos. Es normal ir por la calle y observar a personas que van hablando solas, gente que conduce con una mano en el volante y otra en el móvil, y el colmo, de los colmos, sentarte en el tren dispuesto a disfrutar de un viaje placentero mientras miras por la ventanilla o lees ese libro que llevas tiempo esperando leer y verte de pronto interrumpida por la conversación de tu acompañante que se pasa 2h (no exagero!) hablando con su novio y diciendo cada dos minutos: ¿y qué más me cuenta? ¡Qué más te va a contar chica si hace media hora que tuvo que venir el Samur a por él por falta de oxígeno! Confundido

Es indudable que las nuevas tecnologías nos han facilitado mucho las cosas. Puedes hablar con gente que está lejos de manera sencilla. Volver a reencontrar a esos amigos de la infancia o del colegio. Tener acceso a un montón de información a través de la red. Pero es innegable que esa "conexión" nos está costando muy cara.

Cada vez estamos más "desconectados" de nuestros afectos. No pasamos tiempo juntos, tiempo de calidad me refiero. Tiempo sin móvil, sin internet, sin blackberry, iphone, ipod, facebook...Pensamos que el estar "conectados" nos aportará esa felicidad que buscamos pero se trata simplemente de una ilusión. ¿De qué te sirve tener 1000 amigos en facebook si luego no tienes a nadie con quien quedar el fin de semana? No nos engañemos. Hay que darle a cada cosa su utilidad y su espacio. Nos hemos convertido en esclavos de aparatos que nos prometen "conectarnos" y lo que consiguen es que nos "desconectemos" de la gente que tenemos alrededor.

Por eso desde esta entrada reivindico el "día sin tecnología". Un día para ir al parque con tus hijos, quedar a comer con tus amigos, pasear con tu padre. Un día para "conectarnos" emocionalmente con las personas que nos importan. Reírnos y compartir su tiempo. Llegar a casa y hablar con tus hijos, cenar sin la tele comentando lo que os ha deparado el día. Un día que puede marcar una diferencia en nuestras relaciones, aquellas "reales" que nos pueden aportar felicidad de verdad.

Se que soy una ilusa, que esto que propongo es un ideal...

NOTA: No me hago responsable de los ataques de ansiedad de aquellos "adictos" que pueden sentir el "tecno-mono".

Al principio de esta entrada pedía perdón porque había pecado, y es que este viernes me regalaron una blackberry. Solo espero que si alguna vez quedo contigo y ves que la miro de reojo me lo digas. Quiero "conectarme" contigo.

NOTA PARA APPLE: Desde aquí quiero decirles a los "señores" de Apple que me encantan todos sus productos y que si quieren regalarme el Ipad estaré encantada de usarlo sólo cuando esté sola. ¡Estoy pensando que si cada uno de los 1000 amigos de facebook pone un euro (es poco) tendría para el Ipad y el iphone! (Al final no va a estar tan mal esto de la tecnología) ¡Incoherente que es una! Guiño

© Iciar Piera Iglesias




miércoles, 27 de octubre de 2010

La "sombra" me persigue


  
"Si alguien me despierta aversión o si me sorprendo ignorando o evitando a alguien en un grupo, probablemente estoy huyendo de un rasgo mío que esa persona exhibe. Si algo que tú haces me irrita quiere decir que tu falta también es la mía. La crítica que me hiere es aquella que hace resonar mi propia condenación." Hugh Prather

Desde que vi la película de Debbie Ford, "El efecto de la sombra", quería compartirla con vosotros. Y esta semana, por esas "casualidades" de la vida he tenido la sensación de que la "sombra" me persigue. Me explico. El lunes tenía pensado escribir esta entrada y para relajarme decidí irme al starbucks a tomar un café mientras lo escribía. Me senté, como suelo hacerlo, cerca de la ventana y me puse a leer algo que tenía que preparar para luego dejar tiempo para la escritura. En la mesa de al lado estaban dos chicas sentadas una enfrente de la otra. Hablaban un poco alto y dado que soy "cotilla", empecé a interesarme por su conversación.

Una de las chicas hablaba, con bastante enfado, de su madre. Le molestaba que fuese tan "controladora", que siempre que la llamaba o iba a verla le preguntase que había hecho, con quien había estado. Decía que parecía un sargento al que había que darle el parte.

Su amiga la escuchaba y en un momento dado le dijo, con cierta mano izquierda, que ella también era controladora. Que cuando llegaba al trabajo siempre preguntaba a las compañeras que habían hecho el fin de semana, que donde habían comprado la chaqueta que llevaban, e incluso que esta mañana le había comentado a ella que hacia dos días que no veía su coche cerca de su casa y que si no había dormido en casa.

Que decir tiene que la primera chica cuando oyó la palabra "controladora" trataba de justificar su comportamiento, con uñas y dientes, ya que por su energía y tono de voz se notaba que el que alguien pudiese pensar que era "controladora" era algo que la sacaba de quicio. Ella "no era controladora" decía. Ella se preocupaba por los demás. Si preguntaba donde habías estado el fin de semana, era para interesarse por ti. Si quería saber donde habías comprado algo era porque quería comprárselo ella y el tema del coche era simplemente una anécdota.

Resulta curioso que ella viese sus comportamientos como "preocuparse" ó "interesarse" y sin embargo no viese que esa podía ser la razón de la forma de actuar de su madre.

Como digo, cada vez que la segunda chica le decía que ella creía que si que era "controladora" la primera se ponía a la defensiva, de forma un tanto agresiva, y trataba por todos los medios de hacerle entender a su amiga que ella "no era así".

La sombra es lo que no nos gusta de nosotros, seamos conscientes de ello o no como en el caso de la chica del starbucks. Lo que más odiamos en los demás, como dice la frase que encabeza esta entrada, es algo nuestro que nosotros no vemos y que por lo tanto proyectamos en los demás. Esto es lo que se denomina la técnica del espejo.

Si te das cuenta uno no puede verse a si mismo hasta que se pone delante de un espejo. Cuando estás delante del espejo ves realmente tu imagen. De igual forma las personas de nuestro entorno están constantemente reflejándonos partes de nosotros que nosotros no vemos en nosotros o no reconocemos por tenerlas "asociadas" a algo negativo. En el caso de la chica del starbucks su madre le reflejaba su parte "controladora" pero como ella tenía asociada esa cualidad a algo negativo no la aceptaba en ella. Ella "no era así". Siempre que decimos que "yo no soy así", nos estamos proyectando. Sorpresa

Cuando tú te pones delante del espejo y no te gusta tu imagen, no le pides a la imagen que cambie su aspecto. Si te ves gorda no te pones a regañar al espejo y le empiezas a decir: "¡A ver cuando dejamos de ir al starbucks!". Ruborizado Sabes que si quieres que tu imagen sea diferente la que tienes que cambiar eres tú.

Lo mismo ocurre con la proyección con las personas de nuestro entorno. Si no nos gusta lo que vemos, tenemos que identificar la cualidad que nos proyectan, reconocerla en nosotros, ver donde nosotros estamos actuando como ellos y aceptar esa cualidad en nosotros. Sólo así conseguiremos que la imagen, la proyección cambie.

En otra entrada explicaremos cómo se trabaja con la "sombra" y la "técnica del espejo". Requiere un poco de práctica y sobretodo graaaaaaaaaaaaandes dosis de sinceridad con nosotros mismos.

Si algo de lo que has leído en esta entrada hace que tus resortes salten y empieces a "moverte en la silla" ó a "justificar" que eso no es así o que tú no eres como tu madre, compañera de trabajo, marido, etc., mira un poco más profundamente. Tu propia "negación" es un indicador de que ahí existe algo importante para ti. Una cualidad que necesitas integrar y que esa persona, que es un GRAN MAESTRO, te está ayudando a re-conocer.

Date cuenta que siempre que señalas a alguien hay tres dedos que apuntan hacia ti. Guiño

Te recomiendo dos libros muy interesantes sobre este tema. El primero es de Debbie Ford, coach americana especializada en la "sombra" y autora también de la película que aparece abajo y que te recomiendo encarecidamente que veas. El libro se titula "El secreto de la sombra". El segundo libro me lo regaló ayer una clienta (gracias Inés, ¡tengo unos clientes muy generosos!) y se titula: "La ley del espejo".

Que disfrutes de la película....



© Iciar Piera Iglesias

miércoles, 20 de octubre de 2010

Empuja la pared



"En lo profundo del invierno finalmente aprendí que dentro de mi existe un verano invencible" (Albert Camus)
La semana pasada tenía la primera cita con una chica que estaba interesada en el coaching. Era la última hora de la tarde y cuando se sentó y empezó a hablar lo único que le oí decir fue, "no se lo que quiero", "no se..", "no se...". Ante cualquier pregunta que le hacia la respuesta automática era "no se".

Suelo ser bastante radical con los "noseadictos", en mis sesiones de coaching está prohibido utilizar la frase "no se". Cada vez que decimos "no se", le damos una orden a nuestro cerebro para que se cierre y no siga buscando.

Se lo comenté pero aún así percibía que no tenía energía, casi no la oía de lo bajo que hablaba. En mi mente no dejaba de aparecer la imagen de una pelota de goma a la cual le has quitado el tapón y se va desinflando lentamente.

Entonces decidí jugar con lo que en coaching llamamos la "geografía". Sabemos que la mente sigue al cuerpo y cada estado de ánimo está asociado a una determinada postura corporal, un determinado tono de voz y un lugar en el espacio. La geografía de esta chica me estaba mostrando que se sentía sin fuerzas. A veces cambiar la geografía del cliente es suficiente para que cambie su actitud automáticamente.

Le pedí que se pusiese de pie delante de mi y que juntásemos nuestras manos. Y le pedí que me empujase con todas sus fuerzas. Al principio le chocó y le costaba pero más rápido de lo que se esperaba empezó a empujar con fuerza. Yo me resistía pero ella seguía empujando con fuerza mientras que su cara iba cambiando, se iluminaba y aparecía una gran sonrisa. Su energía cambió automáticamente cuando se permitió conectar con esa fuerza interior que todos tenemos.

Ayer tuvimos la segunda sesión y me comentó que el ejercicio de empujar le había ayudado mucho, tanto que lo practicaba cada día. Y como no tenía a nadie a quien empujar, empujaba la pared. Se ponía frente a la pared y la empujaba con todas sus fuerzas hasta que sentía ese poder y se sentía mucho mejor.

Y no solo eso, cuando fue a tomar el café con una de sus compañeras que no estaba pasando un buen día y se quejaba constantemente le dijo: "ponte en frente de mi, junta tus manos con las mías y empuja mis manos". Al final de esa jornada su compañera le envió un mail para darle las gracias porque después de su encuentro se había sentido mucho mejor.

Todos tenemos una gran fuerza dentro, fuerza que cuando estamos en situaciones límites sale e incluso hace que seamos capaces de levantar un coche si tu hijo está debajo. Cuando nos sentimos tristes, sin fuerzas, sin ilusión, cuando nos sentimos víctimas de las circunstancias o de las personas, conectar con esta fuerza no sólo es necesario: es VITAL, porque nos devuelve la vida y la sonrisa.

Así que te propongo un juego: si te sientes sin ánimo, decaído o víctima de las circunstancias o de las personas de tu alrededor, si sientes que no tienes fuerzas para seguir avanzando en la dirección de lo que quieres o si no sabes lo que quieres, empuja la pared y me cuentas como te sientes después.

Hoy en lugar de quejarte, empuja la pared. No les des el poder a los demás...lo necesitas para moverte en la dirección de tus sueños. : )

Empuja, empuja y sigue empujando hasta que conectes con ese poder interior. Te aseguro que está ahí esperando por ti.

"Solo el que ensaya lo absurdo es capaz de conquistar lo imposible" (Miguel de Unamuno)

© Iciar Piera Iglesias




miércoles, 13 de octubre de 2010

Aqui nadie usa zapatos


"La actitud mental positiva es ver oportunidades donde otros sólo pueden ver dificultades" Walter Salama
Cuentan que hace unos años, un país de los llamados "desarrollados", estaba en una situación difícil y decidió que había llegado el momento de ampliar fronteras. Ese país era bueno fabricando zapatos así que decidieron hacer un estudio de mercado de cara a exportar sus productos, que eran los mejores de la zona, a otros continentes. Para ello decidieron enviar a dos de sus mejores gerentes de venta a zonas diferentes del mismo país, en vías de desarrollo, con el fin de ver como estaba el mercado y analizar las posibilidades de crecimiento que ofrecían.

El primer vendedor viajó hasta ese país y empezó a trabajar minuciosomente analizando las necesidades de la población. Al cabo de diez días y tras una exhaustiva investigación de mercado envió un fax a la gerencia de su empresa en el que ponía: "Señores, cancelen el proyecto de exportación de zapatos. Aquí nadie usa zapatos".

Al mismo tiempo, el segundo vendedor y después de un exhaustivo trabajo de campo envía un fax a la gerencia en el que ponía: "Señores, tripliquen el proyecto de exportación de zapatos. Aquí todavía nadie usa zapatos".


La capacidad de ver oportunidades no es algo con lo que uno nazca, aunque algunas personas estén más predispuestas para ello que otras. Como todo en la vida es algo que podemos entrenar. Las situaciones son "neutras", nosotros les damos el significado y las juzgamos como positivas o negativas. Aprender a preguntarse cual es la "oportunidad" que esta situación me brinda , sobretodo cuando la situación es una de las que denominamos negativas, nos abre todo un mundo de posibilidades. Nos devuelve nuestro poder al dejar de ser víctimas de las circunstancias.

Como decía también Walter Salama: "aunque yo no sea el culpable de mis problemas si soy el responsable de las soluciones". Y estas pasan por enfocarnos en las oportunidades más que en las dificultades.

¿Eres de los que se enfocan en las dificultades o de los que buscan las oportunidades?

© Iciar Piera Iglesias