viernes, 16 de septiembre de 2011

El Helecho y el Bambú



Un día decidí darme por vencido…renuncié a mi trabajo, a mi relación, a mi vida. Fui al bosque para tener una última charla con Dios. 'Dios', le dije. '¿Podrías darme una buena razón para no darme por vencido?'

Su respuesta me sorprendió…'-Mira a tu alrededor', Él dijo.

'Ves el helecho y el bambú?' - 'Sí', respondí. 'Cuando sembré las semillas del helecho y el bambú, las cuidé muy bien. Les di luz. Les di agua.

El helecho rápidamente creció. Su verde brillante cubría el suelo. Pero nada salió de la semilla de bambú.

Sin embargo no renuncié al bambú. En el segundo año el helecho creció más brillante y abundante y nuevamente, nada creció de la semilla de bambú.

-Pero no renuncié al bambú.' Dijo Él.'En el tercer año, aun nada brotó de la semilla de bambú. Pero no renuncié' me dijo.

'En el cuarto año, nuevamente, nada salió de la semilla de bambú.'No renuncié' dijo.

'Luego en el quinto año un pequeño brote salió de la tierra. En comparación con el helecho era aparentemente muy pequeño e insignificante.

Pero sólo 6 meses después el bambú creció a más de 100 pies de altura (20mts). Se había pasado cinco años echando raíces. Aquellas raíces lo hicieron fuerte y le dieron lo que necesitaba para sobrevivir.

'No le daría a ninguna de mis creaciones un reto que no pudiera sobrellevar'.

Él me dijo.

'¿Sabías que todo este tiempo que has estado luchando, realmente has estado echando raíces?'. 'No renunciaría al bambú. Nunca renunciaría a ti. 'No te compares con otros' me dijo.

'El bambú tenía un propósito diferente al del helecho, sin embargo, ambos eran necesarios y hacían del bosque un lugar hermoso'.

'Tu tiempo vendrá' Dios me dijo. '¡Crecerás muy alto!'

'¿Qué tan alto debo crecer?' pregunté. '¿Qué tan alto crecerá el bambú?' me preguntó en respuesta . '¿Tan alto como pueda?' Indagué.

Nunca te arrepientas de un día en tu vida. Los buenos días te dan felicidad. Los malos días te dan experiencia. Ambos son esenciales para la vida. Continúa…

La felicidad te mantiene Dulce. Los intentos te mantienen Fuerte. Las penas te mantienen Humano. Las caídas te mantienen Humilde. El éxito te mantiene Brillante. Pero sólo Dios te mantiene Caminando...

Si no consigues lo que anhelas, no desesperes... quizá sólo estés echando raíces...






6 comentarios:

Alfonso dijo...

Hola Iciar.
Gracias por alegrarme el día. No es lo que nos pasa lo importante, lo importante es lo que hacemos con lo que nos pasa.

Anónimo dijo...

Hola Iciar! Solo lo divino puede conspirar para que tan maravillosa lectura llegue en el momento preciso... Asi habla DIOS!! Gracias Iciar, por un Angel de DIOS!!!

Alberto dijo...

Gracias Icíar. En uno de mis momentos más difíciles, hubo alguien que me dijo: "nada es estéril". Con el tiempo pude comprobar que era cierto.

MARIA dijo...

Simplemente marabilloso,

Eduardo Son dijo...

Hola Piera, he seguido tu blog desde hace algun tiempo y aprendo mucho, esta fábula me ha gustado mucho y pido tu permiso para publicarla también en mi blog. Tu me cuentas si no tienes problemas con ello, y no sé si el crédito de la parábloa es tuyo o se le atribuye a algún otro escritor. De cualquier manera gracias por compartirla.

Iciar Piera Iglesias dijo...

Eduardo, por supuesto que puedes publicar este cuento en tu blog. Desconozco el autor del cuento pero no es mío. Gracias por tus palabras sobre mi trabajo. Un abrazo, Iciar