lunes, 12 de noviembre de 2012

Camino de baldosas amarillas


"Cuando nos sentimos pequeños siempre estamos soñando con hacer algo grande porque seguimos creyendo que el HACER lleva al SER. Pensamos que de esta forma desaparecerán nuestros miedos e inseguridades y nos sentiremos plenos de una vez por todas. Pero nada de lo que hagas, que siempre será una experiencia temporal, te podrá llevar a la experiencia del Ser que es eterna."

Una de las ideas que más tensión me han producido a lo largo de mi vida es la idea de misión. Me explico, durante mucho tiempo me levantaba con la idea de querer conocer cual era esa misión, ese algo que tendría que estar haciendo pero que no podía disfrutar al desconocer. Y así un día tras otro me enfadaba porque el desconocer esa misión, que se suponía que había pactado, hacia que la felicidad asociada se me escapase de las manos. Era curioso, por una parte la idea me producía esperanza, algo así como que tenía cual Indiana Jones una misión que cumplir, algo sagrado, algo especial que hacía que mi "yo pequeño" se sintiese un poco reconfortado frente a los retos y desafíos del día a día. Un caramelito para el alma desconsolada. Pero esa golosina iba cargada de tensión ya que los días pasaban sin tener muy claro que era ESO que transformaría mi vida y mi visión. 

Ese apego a la idea de misión hacía que sintiese mi vida como carente de sentido y propósito y el dolor era insoportable. Y por más que pedía una asignación divina, conocer cual era mi misión, ese conocimiento se me resistía...

Soltar la idea de misión asociada a algo concreto que tengo que hacer ha supuesto un gran cambio en mi vida. Entender que no hay nada que tengas que hacer, diferente a lo que estás haciendo me ha traído una gran paz. Darse cuenta de que tu misión es lo que estás viviendo en este mismo momento. No se trata de salvar a nadie, despertar a nadie, inspirar a nadie...no tiene nada que ver con nadie más que contigo y tu propia vida. Siempre has estado viviendo tu misión, no puedes desviarte del camino aunque el ego te haga creer que si. Siempre has caminado por la senda de baldosas amarillas como Dorothy en el Mago de Oz. Otra cosa es que seas consciente de ello o no. Tu misión se está desplegando en este mismo instante delante de tus narices. ;)

Nuestro único propósito es ser nosotros mismos. Parece fácil, ¿no? El problema es que seguimos empeñados en cambiarnos y cambiar nuestra vida. En rechazar las cartas que nos han sido dadas so pretexto de que me gustan más las de el de al lado o con estas no puedo hacer la jugada que me gustaría hacer o que creo que debería hacer. Entonces pensamos que la vida se ha equivocado, que no nos trata bien, que tiene algo contra nosotros.

¿Puedes imaginarte por un momento lo que siente tu Ser por ti ahí donde estás? ¿Con tus fortalezas y debilidades? ¿Con la situación que estés enfrentando en este momento? Tu Ser te ama incondicionalmente. Vuelvo a repetir, INCONDICIONALMENTE. Sé que a nuestra cabecita le resulta difícil entender lo que eso significa. Tu Ser no necesita que hagas nada especial, tu Ser sólo espera que te unas con él, en este mismo momento, tal y donde te encuentras, pues sabe que en el fondo lo que más deseas es esa unión.

Tu Ser sabe que la felicidad que tanto anhelas no se encuentra escondida detrás de ninguna actividad concreta, de ninguna misión o persona, de nada que no tengas. Tu felicidad se encuentra en este mismo instante, escondida tras el velo de tus propias ideas, deseos, expectativas de lo que este instante "debería ser". Descorrer ese velo es algo que sólo podemos hacer nosotros, nadie puede hacerlo en nuestro lugar. Descorrer ese velo es simplemente quitar el "debería" para quedarnos con el "ser". Es aceptación pura del momento presente. No es haciendo como regresamos a Casa, sino siendo.

"¿Cómo puedo hacer que la paz sea atractiva para ti que no la conoces? La biblia dice: "El sol brilla y la lluvia cae sobre malos y buenos por igual. ¿Por qué crees, entonces, que la paz es un sol perpetuo? La paz es simplemente disfrutar tanto del sol como de la lluvia, de la noche como del día. Cuando no juzgas, la paz brilla sobre todo lo que miras, así como sobre toda situación que enfrentas." Mooji

PD: No te creas nada de lo que escribo en este blog. En el fondo yo estoy en el mismo camino que tú. Contrastalo con tu corazón. Si algo de lo que lees te resuena, si te aporta paz entonces sigue con ello. En caso contrario simplemente déjalo pasar, no es para ti.









2 comentarios:

Alberto dijo...


Hola Iciar.

Suscribo cada coma de tu post. Me he sentido totalmente identificado con él. Yo también echaba de menos una misión, un objetivo que diera sentido a mi vida, hasta que descubrí que basta con vivir este momento, SER este momento. No hay más. Gracias por expresarlo.

Besos

Iciar Piera Iglesias dijo...

Gracias de nuevo Alberto, veo que estamos en sintonía. :) Un abrazo