lunes, 24 de enero de 2011

¿Cueces o enriqueces?

Empiezo esta entrada con mi admirado Jamie Oliver, chef inglés al que sigo con deleite y con el que disfruto viéndole cocinar y mezclar los ingredientes con las manos como si de un niño grande se tratara.

Me encantan sus recetas pero lo que más admiro de él es su "pasión" a la hora de hacer y compartir lo que más ama, cocinar. Su capacidad creativa y su deseo de dejar el mundo un poquito mejor de lo que lo encontró, a través de sus proyectos solidarios (sus restaurantes Fifteen donde emplea a chicos con problemas) y su Jamie's Food Revolution (cambiar los hábitos alimentarios de los ingleses y en las escuelas).

Hace un tiempo asistí a una conferencia acompañando a unas amigas. El tema realmente no me interesaba mucho pero salí completamente entusiasmada. El conferenciante no sólo era magnífico sino que transmitía una amor por lo que explicaba sólo destinado a aquellos que realmente han encontrado lo que Robinson llama su "Elemento". Transmitía tanta "pasión" por lo que contaba que era imposible mantenerse ajeno. Era como si se hubiese encendido un fuego que estoy segura que calentaba el corazón de todos los allí presentes.

Algo parecido pasa con los seminarios de Anthony Robbins. Recuerdo que antes de asistir la gente me decía que entrabas a las 9:00 h y salías a las 24:00 h y que todavía querías más. Me costaba creerlo. ¡Después de asistir yo soy una de las que lo dicen! Robbins es otra de esas personas cuyo impacto en los demás se deja sentir no sólo a través de sus seminarios sino a través de su propia fundación.

Lo que tienen en común Jamie Oliver, el conferenciante y Robbins es su "pasión" por lo que hacen. Les encanta su trabajo y con su mera presencia consiguen contagiarte esa misma pasión. Es como si le hablasen a esa parte de ti que está deseando salir y unirse a ellos en el grupo de los que yo denomino, los "ojos brillantes". Son personas creativas que siempre están imaginando una nueva idea que pueda ayudar a mejorar el mundo. Pero no se quedan en la "imaginación" sino que dan forma a esa idea y actúan para llevarla a cabo, no importa los inconvenientes que encuentren en su camino.

Cuando los ves o les escuchas tu corazón se agita, y ese Yo Grande del que hablábamos en otra entrada se siente feliz ya que reconoce a uno de los suyos.

La interacción con estas personas nunca te resta energía, siempre te la da. Esa es la razón de que acudir a los seminarios de Robbins haga que aunque pases 15 h dentro de una sala, cuando salgas todavía quieras más. El contacto con estas personas es como un chute de adrenalina directa a tu corazón, la esencia de quien tú eres.

Son las personas que yo digo que "enriquecen" ya que su contacto hace que te encuentres mejor de lo que estabas.

Y todos tenemos esa misma capacidad de cambiar nuestro mundo con nuestra actitud. No es algo que está reservado a unos pocos elegidos. Es algo que está al alcance de todos y cada uno de nosotros, es nuestra responsabilidad "enriquecer" nuestra vida y la de los que nos rodean.

En el libro de Alex Rovira y Francés Mirralles, "el laberinto de la felicidad" explican muy bien cómo cada uno de nosotros tiene la oportunidad de cambiar nuestro pequeño mundo a través del "secreto del camarero":


Ariadna contempló expectante las tres tazas vacías mientras el hombre se ponía bien el chaleco antes de iniciar, feliz y sonriente, su explicación:

- He calculado que el contacto de un camarero con cada cliente que pide un café no supera de media un minuto escaso. Es el tiempo que suman el saludo y la pregunta “¿Qué desea tomar?”, lo que te pide el cliente, cuando pones la taza sobre la mesa, la hora de pasar la cuenta y la despedida cuando se marcha. Son muchos momentos diferentes, pero el verdadero contacto entre el camarero y el cliente no supera el minuto.


- ¿Y qué significa eso?


- ¡Significa que es una oportunidad! Independientemente de la calidad del café, que es lo de menos, en ese minuto el camarero tiene ante sí tres opciones, o mejor dicho tres posibles resultados que dependen de su actitud.


Tras decir eso, el camarero hizo una breve pausa para buscar las palabras más adecuadas. Luego explicó:


- En ese minuto puedes conseguir que la persona se marche peor de lo que ha llegado, si eres grosero. O bien puede irse igual que ha venido, si la tratas con indiferencia. Pero también tienes la oportunidad de que esa persona salga del café mejor de lo que ha entrado, si le regalas un poco de amabilidad”
En un mundo y en un momento donde la mayoría de las personas con las que te cruzas se dedican a "cocer" la misma salsa de "crisis" y "negatividad" una y otra vez sin aportar ninguna solución creativa al respecto, es un auténtico placer pasar aunque sea un ratito con este otro tipo de personas.
Esta es la razón de que cada día vea menos TV y lea menos periódicos. En su lugar, leo "La Contra" de la Vanguardia, asisto a seminarios motivadores, veo alguna conferencia de TED o alguna película que me inspire, leo entrevistas a personas creativas y positivas que siempre tienen algo que aportar, o programas como los de mi admirado Jamie Oliver.

Estas personas claramente "enriquecen" todo lo que tocan. Consiguen que tu vida sea más rica y tenga un mejor sabor. Hacen latir tu corazón y que te sientas vivo. Son, según lo que dice Robinson, mi "tribu" y los busco desesperadamente porque yo también quiero ser una persona que "enriquece".

Y tú, ¿Hablas de lo que te gusta y te apasiona o de lo que no te gusta? ¿Das vueltas a tus problemas una y otra vez o actúas para cambiar tu situación? ¿Hablas de tus enfermedades o de lo bien que te sientes? ¿De lo mal que está todo o de aquello que va bien? ¿Te quejas constantemente o buscas soluciones creativas? ¿Ves programas de TV que no te aportan nada donde la gente simplemente se grita o se insulta ó por el contrario apuestas por las personas creativas de las que puedes aprender? ¿Prestas atención al "problema" o por el contrario contribuyes a la "solución"?
Y tú, ¿Cueces o enriqueces?

© Iciar Piera Iglesias





6 comentarios:

Imma dijo...

Interesante e inspirador post, Iciar, como siempre... Hummmm, veamos... Yo cuezo un poquito a veces -más bien me "cuezo" la cabeza por tonterías-, pero ultimamente intento enriquecerme un poco y también enriquecer a quienes están a mi lado... También me gusta leer La Contra, y en la tele me encantan programas como "Singulars" (TV3), o "Reinventar-se" (también en la autonómica catalana Canal 33)..., muy en la línea de La Contra.
Creo que hoy en día necesitamos más testimonios de excelencia. Yo soy maestra y echo en falta que se valore lo que es EXCELENTE, y los ejemplos de personas EXCELENTES en la escuela. El caso del cocinero del que hablas para mí es un buen ejemplo de alguien que es EXCELENTE en lo suyo porque AMA LO QUE HACE. Ojalá cunda...

Anónimo dijo...

Excelente metáfora
Yo era de las que "cocía" y me he dado cuenta de que desde que he dejado de "cocer" soy capaz de afrontar mejor los problemas y además ha mejorado mi trabajo de ayuda a los demás.

Marie Gemignani dijo...

Excelente Iciar, me ha venido como anillo al dedo, esto echa por tierra una montaña de dudas que arrastraba sobre un tema en particular, gracias a una clave escondida aqui..¡mil gracias de corazón!

Pablo Jose Fernandez dijo...

YO QUIERO CAMBIAR EL MUNDO!!
Intento cada dia que me levanto hacer algo fuera de lo comun, de ser una fuente de inspiracion para el mundo, intento dar todo de mi para lograr mis metas y conquistar el mundo...

Hace solo un par de semanas cree mi blog "Voy a cambiar el mundo, y tu? ", y con el quiero encontrar la manera de ser un faro de luz que inspire a otros a enconntrar lw fuerzw en su corazon que les permita brillar con luz propia..

La direccion del blog es :


http://cambiaremos-el-mundo.blogspot.com/2011/01/bienvenidos.html

Espero disfrute leyendolo asi como yo disfruto leyendo su blog.

AAAHHH! Y lo olvidaba: su blog me inspira a seguir con mi cometido hasta mi ultimo aliento...

Anónimo dijo...

Ahí andamos, cociendo ideas cada día con el objetivo de enriquecer a l@s demás en la medida de un café o de lo que podamos. Pasito a paso compartiendo felicidad. Abrazo a tod@s!!

Iciar Piera Iglesias dijo...

Hola Anónimo, gracias por ayudar a enriquecer la vida de los demás y seguir compartiendo alegría y felicidad. Un abrazo, Iciar